Presentan libro ‘El locutor tartamudo’
Se trata de las vivencias de un personaje y su entorno desde las guerrillas del 65 hasta los años de la República Democrática y Fujimori.
Juan es el protagonista de esta historia contada en el libro El locutor tartamudo. Él se instala en Huancayo y, desde entonces, su agitada vida lo lleva por vertientes que dominaron la sociedad de aquellos años, con hitos que lo marcarían, como las guerrillas de los sesentas (como las de Velando y Lobatón), la pedrada a Manuel Odría en su propia tierra, el levantamiento de los escolares de Tarma. Y así, sucesivamente, los gobiernos militares que los siguieron hasta la llegada del aprismo al poder y del primer Fujimori en los noventa.
Alrededor del locutor aparece una pléyade de personajes sustraídos de la realidad cometiendo hechos “de poca recordación porque la memoria del peruano promedio es extremadamente frágil”, señaló el autor de la novela, Manuel Gago Medina (Huancayo, 1959). Agrega que si bien los sucesos relatados en el opúsculo pertenecen a la vida real, no es un compendio historicista que trate de resumir una determinada época y las generaciones que lo ensamblan.
De lectura rápida, simple y sin mayores pretensiones literarias, la obra ha sido escrita siguiendo, lo que para el autor debería ser el principal mandamiento de la literatura. “Según el escritor y periodista Fernando Ampuero existen obras poderosas pero mal escritas y, por el contrario, obras bien escritas pero inertes, anodinas, sin sustancia, sin capacidad para conmover a los lectores”, señala.
“En mi novela ensayo hice esfuerzos para reunir ambas condiciones: narración poderosa y escritura ajustada a la sintaxis, que no es otra cosa que relato ordenado con signos de puntuación y palabras ubicadas en el lugar correspondiente. Soy ingeniero mecánico de la UNCP. Mis únicas lecciones de lenguaje y literatura las obtuve en el colegio salesiano con mis profesores Jorge Nicho y Teófilo Acuña. Gracias a Correo, a Héctor Mayhuire, cuando era director, tengo la oportunidad de escribir una columna semanal desde hace más de 12 años. Con Víctor Andrés Ponce, director del portal El Montonero, estamos aprendiendo a desarrollar con rigor el periodismo de opinión”, cuenta el ahora escritor Gago.
Publicado por la editorial Lancom, el autor hace un repaso de acontecimientos sustantivos que, de diversas maneras, marcaron la vida local y nacional, reitera. Juega con los tiempos, haciendo que el lector actualice hechos anteriormente relatados. Recrea personajes de la vida real desde mediados del siglo pasado que fueron parte de aquel entramado que les tocó vivir.
“Desde mis primeras líneas en el periodismo, la provocación y el narrar rápidamente los hechos, sin más trámite, y con palabras entendibles para todo lector, han sido parte de mi estilo como columnista. Estilo llevado a mi novela ensayo en cada uno de sus 30 capítulos. El humor, tan difícil de lograr, también tiene sus espacios en el libro”, reflexiona.
El escritor tiene cierta inclinación por la chacota, la sorna, el sarcasmo y todo aquello que quiebre seriedades que consumen y dañan esta vida llena de contradicciones y sinsabores. Los textos, como señala el sociólogo e historiador Hugo Neira, sirven para construir ideas, llamar a la reflexión, estimular la imaginación y fijar la memoria colectiva. En El locutor tartamudo existe un intento de todo aquello.
Y es que “los personajes son gente dedicada al estudio, al interés por el conocimiento e información de cada día, necesarios para esa reflexión que tanta falta hace”, señala el nuevo escribidor. Desde las primeras páginas de la obra la docencia es también protagonista. El elenco que acompaña a Juan ejerce ese delicado rol. Hay que leer esta entrega que retrata de alguna manera el perfil cultural de Huancayo y del país. Textos publicados por los diarios: “Expreso”, “Correo”, “Viral” y otros a nivel nacional.